El deambulear tiene mucho que ver con los "recorridos absurdos", es decir, con una ruta en principio irracional.
Hay una leyenda en el pueblo de mi padre (Garciaz, Cáceres) bastante relacionada con los itinerarios absurdos. Resulta que cerca del pueblo hay una roca con una marca con forma de serpiente. Según cuentan, cuando la Virgen María, San José y el niño Jesús huían de Belén a Egipto pasaron por allí y una serpiente los sorprendió en el camino. Todos se asustaron pero la valiente mula le dio una coz contra la roca y allí quedó la señal de su pezuña y de la serpiente.
Está claro que esta leyenda es una readaptación de algún mito tradicional a la religión cristiana, porque Garciaz queda un poco lejos de la ruta Belén-Egipto. Pero es bonito y gracioso pensar que se pudieron desviar "un poquejo"
Pasan los años y mi padre con 6 años y su familia emigran a Madrid en 1966. Ni él ni sus hermanas reciben ningún regalo de Navidad durante su infancia.
Más años y mi padre recala en Vitoria por coincidencias de la vida. y por coincidencias de la vida conoce a mi madre. Y entonces aparezco yo. Pero no por tantas coincidencias celebramos todos los años la nochebuena y el día de Navidad en casa de mis abuelos en Madrid.
Y así es como llegamos de Belén a Madrid en 2011 años. De un mito extraño y difuso a mi realidad más contemporánea. Y como el mito ya se pierde en la lejanía analizaré paseando, como ya dije, la Navidad en Madrid. Ahora que lo pienso tal vez así entienda mejor el mito.
Esto me recuerda al prota de Gladiator. Le hieren luchando contra los bárbaros a la altura de Alemania y llega trotandillo hasta su casa en Cáceres justo antes de desmayarse. Se ve que todos los caminos llevaban a Garciaz en aquella época.
ResponderEliminar